Descubriendo Xian

Hello!!!

Ya hemos llegado a Xian y hemos dejado atrás la gran Shanghai y sus multitudes. Pero no la lluvia! Se ve que el tiempo esta muy revuelto por aqui y esta tarde al final nos ha vuelto a llover un poco. Y mañana se espera más!

Esta mañana después de correr por el aeropuerto pensando que nos cerraban el mostrador, finalmente hemos cogido el avión y hemos llegado a Xian. El hostal está bastante céntrico y está muy chulo y concurrido. Nos ha guiado una chinita que como no, pensábamos que nos quería llevar a otro lado y quien sabe. Pero no, nos ha dirigido bien pues ella estaba alojada en el mismo hostal que nosotros.

La primera impresión de Xian es que es una ciudad grande pero menos moderna que Shanghai. Mucha gente pero sin agobios y eso si, bastante polución. Desde el autobús al centro no hemos visto nada que nos llamara mucho la atención.
Se podría decir que lo más interesante de Xian está entre murallas y y hay varias torres / templos que fueron de mucha importancia durante las antiguas dinastías. Se ve que en esta zona convivieron diferentes religiones, entre ellas la musulmana, de la cual queda mucha influencia.

Lo que hemos visto esta tarde nos ha encantado. Hemos vuelto a la China más auténtica con sus paradas de comida callejera, sus tiendas de souvenirs regateables, su vida en la calle, sus carros y sus motos pitando como locos para que te apartes, su ajetreo. Hemos dedicado bastante tiempo a las compras y a regatear. Carlos y Miriam no han parado desde que nos hemos metido en los callejones repletos de figuritas de guerreros, pinturas, palillos, ropa falsificada, complementos falsificados... Han habido momentos divertidos y momentos incluso tensos como cuando una china no dejaba salir a Carlos de su tienda a menos que comprara algo, encima con malos modales. O cuando se enfadan y te maldicen en mandarín cuando te sales con la tuya en el regateo. Lo que hacemos mucho es irnos después
de batallar con los vendedores y normalmente acaban llamandote para que vuelvas y te hacen precio.

Hemos acabado un poco estresados y nos hemos ido a callejear por las paraditas de comida y literalmente a sumergirnos en la cultura comiendo de los puestos que abarrotan los locales. Pues hemos probado desde unos dulces de masa de arroz que los pasan por azucar, sirope, pipas peladas y algo mas, lo pinchan en un palo y te lo comes como una piruleta. Tambien unos pinchitos de tofu picantes, unas tortas sumergidas en aceite y rellenas de verduritas en un sitio donde la higiene brillaba por su ausencia, unas pitas de verduras con muchas salsas, dulces típicos... vamos que no hemos parado de asombrarnos y degustar lo que teníamos a nuestro alrededor.

Es curioso como en esta zona de Xian muchos chinos van vestidos con gorros o ropas musulmanas, es una mezcla que hace que no sepas muy bien donde estás. Es realmente curioso.

Con la tromba de agua hemos vuelto al hostal y ahora vamos a descansar para mañana ir a ver los guerreros de Terracota y por la tarde dar las últimas pinceladas a esta visita relámpago a Xian.

Un beso a todos!!!

Miri, K and Mike